lunes, 15 de julio de 2013

"Cinco minutos y a escena"

Eres la excepción, la gran excepción de mi vida. Haces que me replantee mi existencia, contigo estoy conociéndome a mi misma, estoy viviendo la vida que quiero, estás a mi lado pero no somos nada y eso me gusta, me gusta ser así, así de libre, porque eso es lo que haces que sienta. Contigo me pasa como en las actuaciones de ballet, estoy en el backstage esperando a que pasen esos pocos minutos para entrar al escenario, esos minutos me matan, me ponen muy nerviosa, siento como si todo lo que hubiera ensayado no sirviera de nada, casi que no puedo respirar, mis pulsaciones van aumentando a medida que le voy restando minutos al reloj, siento como si me fuera a caer al suelo, termino hasta con dolores de estómago pero ya es demasiado tarde porque ya estoy dentro. Luego llega la hora, la hora de entrar al escenario, y ya no puedo controlar mis pulsaciones, ya sí creo que voy a morir, estoy muy nerviosa pero lo intento controlar porque, al fin y al cabo, tengo que hacerlo lo mejor posible; así que entro en el escenario, con mi sonrisa en la cara, como si nunca hubiera estado nerviosa y como si mi única preocupación fuera que se me estropeara el peinado, y bailo para todos y cuando menos me lo espero, ya la canción ha acabado, es hora del saludo final; entro de nuevo a las bambalinas y quiero volver a salir, volver a bailar, porque la canción se me ha hecho demasiado corta.